miércoles, 22 de julio de 2009

LÍNEA B

Cuento trenes
en lugar de horas.
Miro machos
de mirada torva.
Vagones vacíos
en la ciudad tan rota,
silencioso ruído,
paraíso a cuotas.
Contemplo el espacio
mientras me veo a mí mismo;
callo y creo que hablo,
digo y creo que escucho.
La materialidad del sueño
es puro ruído
y éste es un festín de silencios
que aparacaron en un cruce prohibido,
en una mala hora...
Cuento rostros
en lugar de horas:
gestos, desvelos, pieles ajadas;
la catedral acérica no se detiene,
roja, rauda
lleva a su paso mi memoria.
México, D.F. lun 8 de junio de 2009